Qualcomm ha presentado su renovada serie Snapdragon G para 2025, una apuesta ambiciosa que cambia los estándares del videojuego portátil. El nuevo catálogo incluye tres plataformas diseñadas para responder a distintos perfiles de usuario: Snapdragon G3 Gen 3, G2 Gen 2 y G1 Gen 2. Cada una ofrece mejoras tangibles en rendimiento, eficiencia energética y conectividad, en un contexto donde el juego portátil sigue expandiendo sus fronteras más allá de los teléfonos móviles.

Un futuro prometedor para el juego portátil
El Snapdragon G3 Gen 3 destaca como la opción más avanzada del trío. Además de mejora en un 30 % el rendimiento de CPU respecto a su predecesor, añade compatibilidad con Lumen, la tecnología de iluminación global de Unreal Engine 5. Este salto sitúa al chip como el primero de su clase en ofrecer esta funcionalidad para dispositivos Android dedicados al juego. Además, la plataforma incorpora soporte para Wi-Fi 7, un avance clave para reducir latencia y mejorar la experiencia en partidas online.
En un peldaño intermedio, el Snapdragon G2 Gen 2 busca el equilibrio entre potencia y eficiencia. Sus cifras hablan de una mejora del 2,3x en CPU y del 3,8x en GPU frente al G2 Gen 1, lo que lo convierte en una opción idónea para juegos a 144 FPS y experiencias basadas en la nube. Su enfoque está claramente orientado a quienes demandan fluidez y respuesta inmediata sin sacrificar autonomía.
Por último, el Snapdragon G1 Gen 2 se plantea como la puerta de entrada al juego portátil de alto rendimiento. Aunque es el menos ambicioso de la serie, ofrece hasta 1080p a 120 FPS mediante conexión Wi-Fi, además de un incremento del 80 % en potencia de CPU y del 25 % en GPU. Su misión es democratizar el acceso a experiencias de juego en la nube, sin depender de equipos de sobremesa o consolas tradicionales.
Las mejoras en conectividad, autonomía y soporte gráfico tienen una intención clara: impulsar un nuevo ciclo de dispositivos portátiles que rivalicen en prestaciones con consolas más convencionales. Marcas como AYANEO, ONEXSUGAR y Retroid Pocket comenzarán a comercializar equipos basados en esta nueva generación de plataformas a lo largo de este trimestre.
Qualcomm refuerza así su compromiso con el videojuego móvil no solo como extensión del teléfono, sino como experiencia nativa en dispositivos dedicados. Con estos lanzamientos, la firma confirma su apuesta por un mercado que no deja de crecer y en el que el rendimiento gráfico, la baja latencia y la versatilidad serán cada vez más determinantes.